Thrud, la hija de Thor, era una mujer de gran belleza, por lo que no era de extrañar que tuviera muchos pretendientes. Uno de estos era un enano llamado Alvis que, como todos los enanos, contaba con un gran problema: si les daba la luz del sol se convertían inmediatamente en piedra. Por lo tanto Alvis solo podía encontrarse con Thrud en la oscuridad de la noche. Al principio esto era una ventaja, porque Thor solía estar profundamente dormido, ya que el enano sabia que Thor no aprobaba la relación.
La pareja se fue enamorando cada vez mas, hasta que Alvis pidió la mano de Thrud en matrimonio, cosa que ella aceptó muy feliz. Pero desgraciadamente esa noche Thor regreso tarde al Bilskirnir y descubrió a los dos en el momento álgido de su pasión. Lleno de ira, Thor desafió al enano a una prueba de inteligencia que tenia que superar para demostrar que era digno de casarse con su queridísima hija. Alvis acepto y el dios del trueno empezó a hacerle cientos de preguntas en todos los idiomas del mundo. Sin ningún problema, Alvis fue respondiendo a todas y cada una de las preguntas. Así continuaron hasta altas horas de la noche.
Cuando estaba claro que Thor no tenia mas preguntas para el enano, Alvis dio por finalizada la prueba y cogió la mano de su amada. Por desgracia para el, Alvis había subestimado la ira y la astucia de Thor. Al pasar tanto tiempo intentando pasar la prueba, Alvis no se percato de que ya estaba a punto de amanecer. justo cuando cogía la mano de Thrud, sintió como los primeros rayos de sol le tocaban la piel. Así, Alvis se convirtió en piedra y sirvió de ejemplo para cualquier otro que tuviera pensado coquetear con su la hija de Thor.
1 comentario:
Un blog muy interesante,me fascina la mitología vikinga.
Publicar un comentario